Yo no soy jurista pero creo darme cuenta de algunas cosas. Acabo de ver el fallo de la Cámara de casación sobre el tema extracción compulsiva de muestras biológicas a los hijos de Ernestina, y me queda una sensación agridulce, como cuando la Corte Suprema falló sobre el artículo recusado de la Ley de Medios.
El fallo, como se presuponía desde el sentido común, avala el pronunciamiento de la jueza Arroyo Salgado y del Fiscal de Casación y dice que Felipe y Marcela deberán dejar la muestra (pelo, saliva, gota de sangre, etc.) en la Justicia.PERO... Y aquí aparece lo de siempre. Siempre hay un pero para demostrar que la justicia no es tan perjudicial con el monopolio.
Parece ser que la Corte Suprema sentó un precedente con la Ley de Medios, en esto de buscar una vía intermedia en fallos que no sean interpretados como un ataque al monopolio. ¿Una nueva jurisprudencia del abrir el paraguas por las dudas de que cambien los vientos políticos?
Llamémosle como querramos, pero con Felipe y Marcela la Cámara dijo que dejen la muestra, PERO... fijo el día, el mes, el año de inicio y fin de muestras con las cuales podrán cotejarse. Es decir que no se cotejarán las muestras con todo el Banco Nacional de Datos Genéticos.
¿Porqué no comparar las muestras con todo el Banco Nacional de Datos Genéticos?. ¿Por qué, si se interpreta que este proceso busca determinar la identidad de aquellos a los que se la fraguó y de esta manera, al colocar límites al cotejo de muestras aumenta la probabilidad de que no haya coincidencias y los damnificados puedan seguir sin saber su identidad?
Por la jurisprudencia sentada por la Corte Suprema del "vaya uno a saber que pasa en este país después de las elecciones y yo quiero cuidar mi sillón de juez..."
Coincidentemente, Estela de Carloto, tiene la misma sospecha
Gracias Gustavo
No hay comentarios:
Publicar un comentario